Técnicas de impresión: sublimación
Sublimación: impresión digital de nuestro siglo
Conoce esta moderna técnica para imprimir imágenes que comenzó hacia los años 70 y es ahora una de las más utilizadas en impresión industrial.
Sublimación como técnica para transferir imágenes
El término sublimación en su definición genérica es un proceso consistente en el cambio de estado de un material sólido al gaseoso sin pasar por el estado líquido. En el contexto de la impresión gráfica, se trata de un proceso en el que se transfiere una imagen impresa a otra superficie diferente. Frente a la tintas de impresión tradicionales, las tintas de sublimación pasan directamente de estado sólido a gas. Tras enfriarse, las partículas de la tinta regresan a su estado sólido y se quedan impresas en la superficie donde hayan sido aplicadas.
En el siguiente vídeo podrás aprender un poco más sobre esta técnica:
https://www.youtube.com/watch?v=OhK_G_vpuN0
Contexto histórico y principales ventajas de la sublimación
El estampado a través de la sublimación de tinta apareció en los años 70, cuando los ordenadores y las impresoras estaban en su etapa temprana. En esta época se utilizaban unas cintas recubiertas con partículas de tinta que se sublimaban en algunos materiales a monocolor. El proceso empezó a desarrollarse gracias a un pequeño descubrimiento: tras un estudio de la sublimación del agua, dado de forma natural, se reveló como un proceso que también podía ser provocado. De esta forma aparecieron las primeras impresoras y máquinas, en principio más sencillas, que permitieron la evolución de esta técnica que ahora permite una gran variación de colores y dibujos con mucha definición.
¿Cuáles son las principales ventajas de esta técnica?
- Gran intensidad de los colores: gracias a los avances de la impresión digital y de los materiales de las tintas que existen en la actualidad, la sublimación ofrece un resultado de colores intenso en numerosas telas y materiales.
- Óptima resolución: si el dibujo o el modelo que se envía para realizar la impresión está en alta resolución, el resultado será óptimo, con todos los detalles y una buena definición de los colores y los contornos.
- Buenos tiempos de producción: la sublimación es un proceso más rápido que otras técnicas de impresión, como por ejemplo la serigrafía, aunque ambas técnicas son muy precisas y están muy avanzadas en la actualidad.
Los principales protagonistas del proceso de sublimación
A diferencia de otras técnicas, no suele ser un proceso que se realice de forma casera en el hogar; en resumen, los materiales y programas necesarios son:
- Un ordenador con el software necesario para editar y cargar imágenes vectoriales (como Adobe Illustrator) o de mapas de bits (Adobe Photoshop).
- Una impresora piezoeléctrica y cartuchos de tinta de sublimación.
- Papel para sublimar.
- Máquinas para sublimar (planas, para objetos curvos o 3D, según la necesidad).
- El objeto donde se desea sublimar.
Después de conocer todo lo necesario para sublimar quizá te preguntes, ¿y en qué materiales y objetos puedo hacerlo? En principio, cualquier material puede sublimarse mientras cuente con tres características: que pueda ser polimerizado – cubierto con partículas de poliéster en la superficie –, que soporte altas temperaturas y que soporte la presión del proceso de estampado de la tinta
Si deseas conocer más sobre esta técnica o saber cómo la aplicamos en Publitor para nuestros productos, no dudes en escribir todas tus dudas al email comercial@publitor.es o a través de nuestro formulario de contacto.